Bártulos
(tercera entrega)
Si dejas la razón en la estacada
y abandonas tus múltiples hogares
el crepúsculo te cobra su factura.
Serán tus centinelas los vicios veteranos.
No podrás ya fugar de sus intrigas.
Probablemente ignoras que la trama es babosa.
Como al acróbata equilibrista
te sujeta un ligamen, promisorio
caracol acotado a su ralea.
Sobre él das tus pasos,
pero el alambre aguanta,
¿será verdad que aguanta?
Cuando llega el amor
con vendajes lustrosos,
te oprime la certeza de lo frágil,
te invade una ansiedad inapelable,
te consume de celos la avaricia,
no vas a compartir al soberano
que contrasta contigo su deseo,
relegas tu bastón,
tu escudo protector de fantasías,
hay un salto mortal en el milagro
y gime viudedad la cuerda floja.